• Solicitud: Contratas a un valuador certificado.
  • Inspección física: El valuador visita la propiedad para analizar dimensiones, condiciones y ubicación.
  • Revisión documental: Se verifican escrituras, planos, permisos y antecedentes legales.
  • Análisis del mercado: Se comparan propiedades similares en la zona.
  • Cálculos técnicos: Se considera el valor por m², depreciación y otros factores.
  • Elaboración del informe: Se entrega un documento oficial con los resultados del avalúo.